Definir Guatemala a través de un color sería fácil, ya que el verde es el color que inunda todo el país, mientras que el sonido seria el de la Marimba, el animal el Quetzal y el sabor, el de los frijoles, omnipresente en toda la dieta guatemalteca junto a las inseparables tortas de maíz.
Los más de 14 millones de personas que viven en Guatemala (del náhuatl: Cuauhtēmallān: "Territorio de muchos árboles", o "País de muchos bosques") lo hacen mirando el futuro con una sonrisa, mientras su presente quizás no sea el mejor que cabría esperar de un país con tantos recursos naturales, culturales y turísticos de los que dispone.
Sin duda, el destino no ha tratado bien a este pequeño país ya que, desde la declaración de la paz en el año 1996, se han sucedido gobiernos corruptos que han derivado en la realidad de un país con tasas de analfabetización que supera en muchas zonas el 50%, elevadas tasas de delincuencia, una población eminentemente rural, al que debemos añadir una inexistente política social, educativa, sanitaria, etc. Pero no todo iba a ser malo, su gente es moderadamente feliz y se nota, pese a sus problemas económicos y sus miserias, teniendo que sobrevivir día a día sin demasiadas facilidades, vayas por donde vayas te transmiten la mayor de las alegrías: el hecho de estar vivo pese a todo. Hecho este, que a alguien que vive en el primer mundo, le pudiera parecer imposible ya que nuestro día a día nos impide reconocer que existen otras muchas realidades más allá de la nuestra.
EL PROYECTO INTERVIDA
Jamás pensé sentir tantas sensaciones en un solo día, pero como oí en este país que “el jamás siempre llega”, después de visitar los proyecto educativos y sanitarios que la ONG Intervida tienen en Guatemala, fue uno de esos pocos días que jamás olvidaré.
La visita tenía por objetivo conocer a un niño apadrinado, desde hacía muchos años, por una persona del grupo a través de la cuestionada, ONG española, Intervida. Acudí con escepticismo a la visita ya que no pensaba descubrir nada nuevo pero, como suele pasar, lo mejor viene de lo inesperado, y lo que allí encontré, o mejor dicho creo que encontramos todos, fue el esfuerzo de muchas personas por conseguir hacer felices a muchos niños y niñas que nacen en el lugar equivocado.
Nos llenamos de la felicidad que los niños nos transmitían con sus sonrisas y sus deseos en conocer a aquellos individuos que venían de muy lejos, de un mundo aparentemente mejor lleno de facilidades, para invadir su pequeño mundo.
Nuestra intensa visita sirvió para descubrir al irnos que la realidad que dejábamos atrás no era, ni de lejos, lo que cualquier niño/a de nuestro país tiene habitualmente. Cientos de miles de niños y niñas que viven en un mundo rural, en el que la educación no es obligatoria, los niveles de pobreza son levados, a la que debemos unir la inexistencia de infraestructuras básicas, hacen muy difícil conseguir un futuro más allá que el trabajo en el campo para los niños de más de 14 años, o el cuidado de sus hijos en el caso de las niñas.
La dotación de infraestructuras básicas a las escuelas (baños, sillas, pizarras, etc), la donación de material escolar, el esfuerzos de los médicos en dotar de una sanidad básica inaccesible al pueblo por su elevado coste, hacen más que justificada la existencia de esta, y otras muchas ONG’s, que día a día llegan a lugares al que el gobierno, en este caso de Guatemala, no llega.
Por lo tanto, merece la pena colaborar con esta u otras ONG’s, apadrinando niños/as, ya que fui testigo directo de que la ayuda llega y que un poco de dinero al mes pude servir para hacer más por los demás.
EL PROYECTO INTERVIDA
Jamás pensé sentir tantas sensaciones en un solo día, pero como oí en este país que “el jamás siempre llega”, después de visitar los proyecto educativos y sanitarios que la ONG Intervida tienen en Guatemala, fue uno de esos pocos días que jamás olvidaré.
La visita tenía por objetivo conocer a un niño apadrinado, desde hacía muchos años, por una persona del grupo a través de la cuestionada, ONG española, Intervida. Acudí con escepticismo a la visita ya que no pensaba descubrir nada nuevo pero, como suele pasar, lo mejor viene de lo inesperado, y lo que allí encontré, o mejor dicho creo que encontramos todos, fue el esfuerzo de muchas personas por conseguir hacer felices a muchos niños y niñas que nacen en el lugar equivocado.
Nos llenamos de la felicidad que los niños nos transmitían con sus sonrisas y sus deseos en conocer a aquellos individuos que venían de muy lejos, de un mundo aparentemente mejor lleno de facilidades, para invadir su pequeño mundo.
Nuestra intensa visita sirvió para descubrir al irnos que la realidad que dejábamos atrás no era, ni de lejos, lo que cualquier niño/a de nuestro país tiene habitualmente. Cientos de miles de niños y niñas que viven en un mundo rural, en el que la educación no es obligatoria, los niveles de pobreza son levados, a la que debemos unir la inexistencia de infraestructuras básicas, hacen muy difícil conseguir un futuro más allá que el trabajo en el campo para los niños de más de 14 años, o el cuidado de sus hijos en el caso de las niñas.
La dotación de infraestructuras básicas a las escuelas (baños, sillas, pizarras, etc), la donación de material escolar, el esfuerzos de los médicos en dotar de una sanidad básica inaccesible al pueblo por su elevado coste, hacen más que justificada la existencia de esta, y otras muchas ONG’s, que día a día llegan a lugares al que el gobierno, en este caso de Guatemala, no llega.
Por lo tanto, merece la pena colaborar con esta u otras ONG’s, apadrinando niños/as, ya que fui testigo directo de que la ayuda llega y que un poco de dinero al mes pude servir para hacer más por los demás.
Nunca podré olvidar ese día, ni al niño que se me acercó para pedirme trabajo ya que su padre había muerto y tenía cinco hermanos a los que cuidar. Por sus preguntas pude ver en su cara que había dejado de ser niño a sus poco más de 9 años, ya que el destino había hecho caer sobre él la responsabilidad de mantener a toda su familia ya que no tenía padres y estaban todos a cargo de su abuela. No le pude decir nada más allá que yo vivía muy lejos y que no le podía dar trabajo. Ahora pienso que vivo mi dia a dia quizas demasiado lejos de esta y otras muchas realidades rodeado quizas de demasiadas cosas frente aquellos que no tienen nada.
EL PROYECTO COMUNITARIO DE LA COMUNIDAD MAYA QEQCHI
No sorprende ver en toda Guatemala la cantidad de Cooperación española que se destina al desarrollo de este país, sorprende un poco más saber que el Gobierno de Canarias ayuda a la ciudad de Antigua, patrimonio de la humanidad, a la realización de su planeamiento urbanístico o como la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ayuda a una comunidad maya a desarrollar un proyecto de gestión de un hotel restaurante en Lagunitas del Salvador.
Esta Comunidad de Lagunitas el Salvador, sería un lugar poco probable para visitar para un turista que dispone de poco tiempo para conocer este país, pero las casualidades nos hizo llegar hasta allí, bueno la casualidad no, fue la presencia de una canaria que pasó sus vacaciones cooperando con esta comunidad, enseñándoles como desarrollar un proyecto de gestión del ecohotel que han creado en la selva muy cerca de la orilla de una laguna habitada por los manatíes.
En los días que allí vivimos tuvimos la oportunidad de descubrir que la inteligencia natural de sus habitantes era superior a lo que podían aprender de nosotros. Los miembros de esta comunidad han sabido convertirse en emprendedores de un modelo de desarrollo sostenible para su comunidad basado en el sentido común y en las ganas de aprovechar su mayor riqueza, la naturaleza y sus gentes.
Cuando se gestionan proyectos se tiende a olvidar que hay gente detrás que tienen su futuro y esperanzas basados en los mismos. En Lagunitas el Salvador tuvimos la oportunidad de poner cara y conocer sus nombres. Los días de convivencia con esta comunidad maya, de algo más de 100 habitantes, no pueden terminar en un adiós ahí te quedas, sino que debe servir para que, en la medida de nuestras posibilidades, les ayudemos a conseguir ese futuro por el que trabajan.
EL PROYECTO COMUNITARIO DE LA COMUNIDAD MAYA QEQCHI
No sorprende ver en toda Guatemala la cantidad de Cooperación española que se destina al desarrollo de este país, sorprende un poco más saber que el Gobierno de Canarias ayuda a la ciudad de Antigua, patrimonio de la humanidad, a la realización de su planeamiento urbanístico o como la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria ayuda a una comunidad maya a desarrollar un proyecto de gestión de un hotel restaurante en Lagunitas del Salvador.
Esta Comunidad de Lagunitas el Salvador, sería un lugar poco probable para visitar para un turista que dispone de poco tiempo para conocer este país, pero las casualidades nos hizo llegar hasta allí, bueno la casualidad no, fue la presencia de una canaria que pasó sus vacaciones cooperando con esta comunidad, enseñándoles como desarrollar un proyecto de gestión del ecohotel que han creado en la selva muy cerca de la orilla de una laguna habitada por los manatíes.
En los días que allí vivimos tuvimos la oportunidad de descubrir que la inteligencia natural de sus habitantes era superior a lo que podían aprender de nosotros. Los miembros de esta comunidad han sabido convertirse en emprendedores de un modelo de desarrollo sostenible para su comunidad basado en el sentido común y en las ganas de aprovechar su mayor riqueza, la naturaleza y sus gentes.
Cuando se gestionan proyectos se tiende a olvidar que hay gente detrás que tienen su futuro y esperanzas basados en los mismos. En Lagunitas el Salvador tuvimos la oportunidad de poner cara y conocer sus nombres. Los días de convivencia con esta comunidad maya, de algo más de 100 habitantes, no pueden terminar en un adiós ahí te quedas, sino que debe servir para que, en la medida de nuestras posibilidades, les ayudemos a conseguir ese futuro por el que trabajan.
Les deseo toda clase de éxitos y creo que entre todos debemos ayudarles a conseguir que el proyecto de desarrollo que se han marcado como objetivo sea sostenible en el tiempo. Si tienen la oportunidad visiten aunque sean virtualmente, su pagina web http://www.culturamayalagunitaguatemala.com/
LOS MAYAS
Los mayas son los pueblos habitantes de una vasta región que se ubicaba geográficamente en el territorio del sur de México, Guatemala y otras zonas de América Central. Es especialmente importante su presencia e influencia en los territorios de las actuales Guatemala, Belice, Honduras, Yucatán y Chiapas, con una buena historia de unos 3.000 años.
LOS MAYAS
Los mayas son los pueblos habitantes de una vasta región que se ubicaba geográficamente en el territorio del sur de México, Guatemala y otras zonas de América Central. Es especialmente importante su presencia e influencia en los territorios de las actuales Guatemala, Belice, Honduras, Yucatán y Chiapas, con una buena historia de unos 3.000 años.
En Guatemala se encuentra uno de los mejores ejemplos de templos y ciudad maya. En Tikal desde donde tuvimos la oportunidad de ver amanecer situado en lo alto del templo IV, constituyó para mi una bonita experiencia desde donde contemplar desde un lugar con más de 2.000 años de antigüedad que día tras día amanece por el mismo lugar, dejando a ciento de generaciones y de culturas por el camino.
LA RELIGIÓN
Resulta curioso observar como se entremezcla en la Guatemala de hoy la población indígena con sus creencias y costumbres, con la herencia dejada por los españoles, como la religión católica, omnipresente en un país fuertemente religioso, donde decir que venimos de las islas donde nació el hermano Pedro, sirve como salvoconducto en toda Guatemala.
Debo mencionar la gran obra del recientemente Santo Chicharrero llamado Hermano Pedro, después de visitar el hospital que creó para los más pobres, entre lo pobres, los enfermos, fundamentalmente niños que no podían, ni pueden, acceder a un inexistente sistema de salud gratuito.
Pasear por los pasillos del hospital a través de las entrañas de la realidad, escondida bajo las paredes de un hospital, resulta una experiencia difícil de soportar, y que al menos a mi me sirvió para admirar el esfuerzo de tanta gente, como el hermano Pedro, que dan todo a cambio de nada.
EL GRUPO
Dicen que los compañeros de viaje no se escogen sino que los distintos caminos hacen que un día 13, en ocasiones 14 o 11, personas coincidan y compartan más de 20 días lejos de sus casas.
La realidad es que un grupo no se hace esporádicamente de la noche a la mañana, sino que se hace día a día, nutriéndose de los buenos y no tan buenos momentos que se comparten intensamente durante este largo viaje. Esto hace sin duda que piense que aquí, o en cualquier otro lugar del mundo, siempre exista un momento para brindar con Ron Zacapa, o con Coca Cola en mi caso, con los compañeros de grupo recordando el viaje entre grandes carcajadas.
EL GRUPO
Dicen que los compañeros de viaje no se escogen sino que los distintos caminos hacen que un día 13, en ocasiones 14 o 11, personas coincidan y compartan más de 20 días lejos de sus casas.
La realidad es que un grupo no se hace esporádicamente de la noche a la mañana, sino que se hace día a día, nutriéndose de los buenos y no tan buenos momentos que se comparten intensamente durante este largo viaje. Esto hace sin duda que piense que aquí, o en cualquier otro lugar del mundo, siempre exista un momento para brindar con Ron Zacapa, o con Coca Cola en mi caso, con los compañeros de grupo recordando el viaje entre grandes carcajadas.
(Después de leer lo que he escrito sobre las 5 de la mañana, después del concierto de Sabina y Serrat, me sonrojo de lo cursi que se puede ser bajo los efectos del jet lag. En fin ya a mi edad se va perdiendo la vergüenza)
2 comentarios:
Sabia que este año ibas a pasar tus vacaciones en Centro América. Por tu "blog" veo donde has estado, lo que has vivido y sentido.
También estuviste con tus compañeros de viaje viendo la labor tan importante que hacen las ONG's. Yo tuve apadrinado un niño muchos años por Intervida. Por eso me he alegrado que hayas visto todo lo que hacen en beneficio de tantos niños, por tan poca cantidad de dinero.
No pierdas nunca esa sensibilidad que te caracteriza como la gran persona que eres.
Saludos, Ana
Me alegro de ese viaje, y no creo que lo escrito sea cursi. La sensibilidad no tiene que ver con la cursilería. Un abrazo. Las fotos son preciosas.
Publicar un comentario